Va a casa de su novia a follar y se la folla… con su madre
Cuando empiezas a pensar en sexo siempre acabas pensando en follar con una auténtica madurita. Pensando en las típicas MILFs que nos han vendido la industria del porno, la típica madre de tu amigo buenorra a la que te follarías sin parar a diario. Este chico es un auténtico suertudo pues a cumplido la fantasía de miles de jóvenes. Una tarde decide irse a buscar a su novia a casa sin avisar, queriendo darle una sorpresa y viendo si así consigue follársela, ya que esta es un poco estrecha y el chaval sigue aun siendo virgen. Nada más llegar a la casa, descubre que la actitud de ella ha cambiado. Pareciera que quiere estrenarse esta misma tarde, así que la dulce chica empieza a sobar su pantalón abultando cada vez más el pollón de su novio, el tesoro que la enamoró. El chico se empieza a arrepentir, le dice que está enamorado y que no puede ser la primera vez así, debe ser bonito y romántico. La tía cachonda perdida intenta por todos los medios que cambie de opinión. Pero al final acaba enfadada con él y se larga de casa.
La madre de la novia cotilleando a la guarra de su niña
La madre de su novia atenta a la situación, cotilleando como cualquier madre se dió cuenta de todo lo sucedido y va hacía el salón intentando apoyar al chaval. Y allí estaba él, en ese sofá esperando la vuelta de su novia con la madurita de su madre al lado, vestida tan sexy como siempre. Pensando en la de pajas que se ha hecho a lo largo de los años con su mente puesta en ese culazo que parece que se va a salir de lo enorme y bonito que es. El chico se empieza a poner nervioso e incluso algo excitado al estar con semejante hembra madurita completamente solos. La mujer, que ya tiene experiencia debido a su edad empieza a notar lo nervioso que está el pobre, así que decide tomar cartas en el asunto y empieza a interesarse por la vida sexual que tiene con su hija. Él le contesta diciéndole que aun no han practicado sexo y ella sorprendida le dice que cómo es posible eso… Siendo un chico tan guapo y tan dotado, mientras mira el paquete del crío de 18 años que tiene enfrente, totalmente erecto con un bulto impresionante. El chaval queda avergonzado al oír eso, pero también siente mucha excitación así que se deja llevar y la madurita madre de su novia empieza a jugar con él.
Madurita se folla al novio de su hija
Empieza rozando su enorme polla, pasando y acariciando con su mano la bragueta del joven. Por su cara incluso parece que no durará mucho y se correrá con apenas unas caricias, a pesar de que está encantado empieza a pensar en su dulce chica y decide pararle los pies, pero de una forma un tanto peculiar. Se nota que el chico desea que la situación siga siendo la misma, así que la mujer empieza a morderse los labios mientras sigue metiendo mano a ese bulto tan descomunal que tiene ahí. Debido a su experiencia la madurita mujer consigue que el chico le dé lo que a su hija no pudo darle… empieza a sacar su polla y la madura cachonda al ver ese tamaño comienza a masturbarlo a la vez que el crío, acostumbrado a hacerse las pajas en solitario. No tarda en dejar las cosas en mano de profesionales y suelta su polla para disfrutar de una auténtica paja. Por primera vez siente a una mujer pajeando su enorme rabo no para… La mujer se vuelve loca y decide mamarle la polla, a sabiendas que su marido para nada da la talla y que seguramente no volvería a catar algo así en la vida, la chupa como una posesa.
Después de follarse a la madre, toca follarse a su novia
Al acabar la mamada la madurita se marcha y deja al tío tirado en el sofá. Después de un rato relajándose y pensando en lo que había sucedido acaba apareciendo de nuevo su novia y le reclama lo mismo que antes.. sexo. Este chico anda ya tan cachondo sabiendo que puede cumplir otra fantasía como la de follarse a una madre e hija que no se lo piensa mucho y se deja hacer. Su novia, inexperta en el sexo acaba buscando su rabo para comerlo, pero no tiene la misma técnica que su madre. La madre que andaba por ahí cotilleando se da cuenta de ello y decide intervenir, le enseña a ser una auténtica guarra como ella, y se ponen a comer ese pollón entre las dos e incluso por último la pone a 4 patas y la folla bajo la atenta mirada y ojo crítico de su madre. Se están follando a su hijita como debe ser, no quiere que su hija acabe siendo una insatisfecha sexual con un hombre que no le sepa dar placer. Ya tiene esa experiencia con su marido y por eso ha decidido enseñar a estos dos jóvenes para que disfruten del sexo juntos a diario.